MAS NUNCA DEBE VOLVER A PASAR.. POR LA DIGNIDAD HUMANA

Mirar como espectadora tantos acontecimientos que sufre mi país, es tan diferente a hacer las noticias. Por más que he querido alejarme en este desahogo laboral, no he podido dejar de pensar en esos 5 chicos que el Día de los Mártires, ampliaron la cifra de víctimas de ese trágico 9 de enero.
Mientras muchos reivindicaban la gesta patriótica de 1964, cuando jóvenes panameños cayeron defendiendo la soberanía panameña, 7 chicos panameños, en la más cruenta masacre de un penal en Panamá, ardían, se consumían en llamas y sus cuerpos, salían despellejados, rojos a flor de piel, entre gritos desgarradores de angustia, impotencia y lágrimas de quienes creeemos en el derecho a la vida.
La crisis del agua fue desvastadora, y esta angustia de gritos, que se repetían una y otra vez en las televisoras panameñas, al ver calcinarse a 7 jóvenes en el Centro de Cumplimiento de menores, era la muerte anunciada, el desborde de la crisis carcelaría que sostuvo siempre nuestra amiga Maribel Jaén de Justicia y Paz de la Iglesia Católica.
Impavidos, amarrados de manos, exhautos, desprotegidos, estos 7 detenidos, menores infractores, vivieron la realidad que por años en la miseria muchos han ignorado.
Hablo de la angustia vivida por la crisis del agua, porque fue como un detonante que nos ha mantenido en vilo, por primera vez en la historia de mi país. Pero con ello, el sufrimiento de un pueblo harto de sed, pero adolorido porque otros panameños, policías, se hicieron de la vista gorda y dejaron que 7 jóvenes se quemaran vivos.
Esta tragedia nos lleva a reflexionar, cuanto se ha perdido el sentido humano de la vida. Una barbarie jamás vivida en mi país. No hay justificación. El amor de Dios al menos a los cristianos y católicos nos hace ver claramente, que no somos quienes para juzgar, pero si exigimos respeto a la vida.
Hoy aquellos que ignoran ese desamor y que desatan críticas deshumanizantes, tendrán que rendir cuentas ante Dios.
Hoy sobreviven dos de los 7 chicos, entre recuerdos, de esas llamas que los dejaron casi inhertesk, pero en medio de oraciones de fe, y el clamor de un pueblo que quiere justicia, que tiene sed de cambio en la conciencia de los panameños.
Respetemos la vida y la dignidad humana.
Hoy mi Patria llora a 5 nuevos mártires, que terminando sus condenas, fallecieron en las masmorras de mi país. Siendo presas de la indiferencia y el maltrato policial.
Los periodistas seguiremos diciendo la verdad, basados en el amor como cristianos y defendiendo los derechos fundamentales de los seres humanos. La vida.

Comentarios

Entradas populares de este blog

Juan Ramón Messina: ¿Crimen por venganza? El hombre que conocí como periodista

CASOS DE ABOGADOS QUE HAN SIDO ASESINADOS Y SUFRIERON ATENTADOS INCLUYENDO A FISCALES

Modelos y los nexos del narcotráfico en Panamá. Bajo investigación "La Chechi" Castroverde